[vc_row][vc_column][vc_column_text]Así como desde pequeños nos preocupamos por llevar a nuestros hijos al dentista, debemos asegurar que un especialista les haga una revisión auditiva, ojalá una vez al año, donde le realicen distintas pruebas de audición.

¿Qué es una prueba de audición?

En palabras sencillas, las pruebas de audición miden qué tanto escucha un niño.

En términos generales, las audiometrías son pruebas diagnósticas totalmente indoloras, no invasivas y que no causan ninguna molestia.

Estos exámenes nos permiten detectar los problemas auditivos en su etapa inicial para actuar con rapidez en caso de anomalías.

La importancia de este tipo de exámenes es porque los problemas de audición en la niñez temprana pueden tener consecuencias serias para el desarrollo del lenguaje y el habla, para la socialización y la experimentación de una infancia plena.

¿Cada cuánto debe revisarse la capacidad auditiva de un niño?

Generalmente, a los recién nacidos se les hacen pruebas de audición antes de salir del hospital. Además, ese examen se debe repetir dentro de los tres próximos meses.

Después de eso, a los niños se les debe hacer pruebas de audición en los chequeos médicos de rutina, incluyendo un examen físico para comprobar que no tenga exceso de cera, líquido o infección.

Finalmente, de acuerdo con el sitio especializado Medline Plus, la Academia Americana de Pediatría recomienda hacer pruebas de audición más detalladas a los 4, 5, 6, 8 y 10 años.

Por su parte, la Organización Mundial de la Salud recomienda llevar al niño al especialista si presenta dolores en los oídos, supuración o problemas para aprender a hablar, por ejemplo.

De acuerdo con esa institución global, En los niños, casi el 60% de la pérdida de audición se debe a causas como otitis y complicaciones congénitas que pueden prevenirse con medidas de salud.

En ese sentido, si su hijo tiene síntomas de una pérdida auditiva, nuestro criterio profesional es que se realicen pruebas con carácter urgente.

¿Qué síntomas pueden significar que su hijo requiere una revisión auditiva urgente?

Algunos de los síntomas de una pérdida auditiva antes del primer año de edad son:[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row content_placement=»middle»][vc_column width=»1/2″][vc_column_text]

• No reaccionar ante ruidos fuertes ni sobresaltarse.
• No responder a la voz de los papás para los 3 meses de edad.
• No voltear la cabeza hacia la fuente de un sonido para los 6 meses.
• No imitar sonidos o decir algunas palabras al cumplir 1 año.

Y en los niños más grandes algunos síntomas de posible sordera son:

• Dificultad para hablar.
• No responder cuando se le llama.
• Dificultad para comprender lo que dicen otras personas.
• Problemas para escuchar sonidos agudos.
• Tener que subir el volumen del televisor o el reproductor de música cada vez más.
• Poca socialización y aislamiento.
• Zumbido en los oídos.

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¿Qué tipo de pérdidas auditivas puede experimentar un niño?

La pérdida de la audición o hipoacusia puede ser de tres tipos:

• Conductiva: Causada por un bloqueo en la transmisión del sonido al oído debido a infecciones o acumulación de líquido en los oídos. Es común en los bebés.
• Neurosensorial: Generada por un problema permanente en la estructura del oído o en los nervios que controlan la audición. Los niños pueden nacer con este problema o adquirirla más adelante en la vida.
• Combinada: Es una combinación de pérdida auditiva conductiva y neurosensorial

Ante un escenario de posible pérdida auditiva, hay distintos exámenes que podemos realizar. En nuestra Clínica de Rehabilitación Auditiva disponemos de distintos servicios de audiología que están disponibles para usted y su familia.

Realizamos audiometría infantil y escolar. Además, brindamos el servicio de recepción y atención de recetas para audífonos infantiles, emitidas por hospitales y clínicas de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) y ofrecemos citas de seguimiento y baterías gratis por dos años.

Contáctenos de inmediato y le atenderemos con gusto.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]