Un reciente informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) revela que más del 5% de la población mundial padece una pérdida de audición discapacitante y proyecta que esa cifra se duplicará en 2050.

En el entendido de que la sordera no tiene cura, sino tratamientos para mitigar sus efectos, significa que en el mundo hay 430 millones de personas que requieren procesos de diagnóstico y rehabilitación.

Entre las causas atribuidas a la pérdida de audición se encuentran las infecciones de oído, predisposiciones genéticas, lesiones en la cabeza y ciertos medicamentos, pero la mayor incidencia proviene de la exposición prolongada a ruidos fuertes y el proceso de envejecimiento.

El tratamiento depende de la causa y la intensidad de la pérdida de audición, y entre las opciones se encuentran la extracción de un tapón de cerumen, los procedimientos quirúrgicos, los audífonos y los implantes cocleares.

Existen diversos procedimientos para diagnosticar la causa del padecimiento y definir un tratamiento ajustado al grado de intensidad de la sordera que afecta a cada paciente.

En la Clínica de Rehabilitación Auditiva, incluimos como métodos de diagnóstico la audiometría clínica, la timpanometría y la impedanciometría o immitancia acústica:

Audiometría clínica

Es una valoración auditiva tonal, de carácter subjetivo, que se realiza para medir la audición, mediante una métrica que determina cómo y cuánto escucha el paciente.

Mediante la audiometría, evaluamos la capacidad de la persona para escuchar sonidos, de acuerdo con su intensidad (volumen) y su tono (velocidad de la vibración de las ondas sonoras).

Realizamos el examen mediante tres procedimientos: un audiograma de tonos puros, una audiometría verbal con la ayuda de audífonos y una impedanciometría o immitancia acústica mediante la utilización de una sonda.

Timpanometría

No es un examen de audición, sino un procedimiento para el análisis de la resistencia que opone la membrana timpánica al paso de las ondas sonoras.

Más específicamente, la timpanometría es una prueba que nos permite medir la condición en que se encuentra el oído medio y la movilidad del tímpano y los huesecillos conductores del oído, creando variaciones de presión de aire en canal auditivo.

Debemos analizar los resultados de esta evaluación en conjunto con la información obtenida mediante la audiometría clínica.

Medición de ruidos

Otro factor que influye en la capacidad de las personas para escuchar y diferenciar los sonidos es el tinnitus, (ruidos que se perciben como zumbidos, chasquidos, latidos del corazón y timbres de bajo tono o producidos por cuerpos extraños).

En este caso, realizamos una audiometría en un espacio aislado de ruidos, donde colocamos auriculares, al paciente, para que detecte la identidad de los sonidos que escucha y nos permita compararlos con los que son normales para su edad.

Una solución para reducir los síntomas y la tensión causados por el tinnitus es recurso de las terapias acústicas de sonido, que permiten cambiar la forma como un paciente percibe o reacciona a la molestia causada por los ruidos.

Además de los servicios para la prevención, detección y rehabilitación de pacientes afectados por sordera o tinnitus, a través de profesionales adscritos al Colegio de Médicos y Cirujanos de Costa Rica y el Colegio de Terapeutas de Costa Rica, en la Clínica de Rehabilitación Auditiva somos proveedores de prótesis auditivas.

Como parte integral de nuestro proyecto de salud auditiva, vendemos audífonos fabricados por las renombradas empresas tecnológicas suiza y alemana, baterías y accesorios y brindamos servicios de mantenimiento.

¡Contáctenos y le brindaremos una atención personalizada!